¿Con quién rebotar los problemas de negocios?
Hacerlo con cualquiera se convierte en una imprudencia. Elegir alguien que no los comprenda correctamente, suele traducirse en algo inútil. Optar por rebotarlos con un verdadero experto, puede resultar difícil u oneroso. Dirigir implica resolver problemas. Resolverlos supone que los has comprendido y que te has allegado de los medios adecuados y proporcionados para materializar una solución adecuada. Comprenderlos, obliga a identificarlos, dimensionarlos, meditarlos y procesarlos.